Muchas historias desalentadoras han salido a relucir tras la tragedia de Quetame, Cundinamarca. Una de ellas es la de la capitana Lisbeth Herrera, comandante de la Policía del Aeropuerto de Cartagena, que perdió 19 familiares en la tragedia.

El pasado martes 18 de julio, el general Tito Castellanos, subdirector de la Policía Nacional reveló la historia de la oficial.

Primos menores de edad, tíos, tías, hermanos y su padre, fallecieron tras la avalancha. “Todos murieron y aún falta por aparecer mi madre y una tía”, detalló hoy Lisbeth en una entrevista a Semana.

La comandante se encuentra sumida en la incertidumbre y el dolor, llegó el viernes para recibir los cuerpos de sus familiares. “En la tarde bajó a Quetame a seguir buscando a mi mamá”.

Como el caso de Herrera, existen muchos. Como el hallazgo del cadáver de un niño de 10 años bajo los escombros, que conmovió a los socorristas.

Según el delegado departamental de los Bomberos de Cundinamarca, Álvaro Farfán, el cuerpo del niño fue hallado en la vereda Naranjal, lugar donde la avalancha atacó con más fuerza, luego de las crecientes que produjeron la emergencia.

Este viernes, ya eran 26 los cuerpos recuperados, según informó el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, y añadió que buscan a otras 3 personas.

"Finaliza por este viernes la jornada de búsqueda de las personas desaparecidas. El día de hoy hemos encontrado 5 cuerpos más para un total de 26. Tenemos la tarea mañana las 3 personas que aún están desaparecidas", informó García a través de sus redes sociales.

También fueron evacuadas más de 100 familias que vivían entre los ríos Negro y Contador, debido al riesgo de otra posible avalancha.